sábado, 24 de octubre de 2009

Galápago leproso (Mauremys leprosa)


Fotografía: Galápago leproso adulto

El nombre de galápago leproso viene dado por el deteriorado aspecto que presentan algunos ejemplares adultos en su caparazón, motivado por la proliferación de ciertas algas que provocan descamaciones desagradables de las placas del caparazón.
También es conocido como tortuga de agua o tortuga de rierol.
Hábitos
Es un reptil de costumbres muy acuáticas y predominantemente diurno. Nada y bucea muy bien, aunque le gusta pasar largas horas tomando el sol, alerta ante cualquier peligro, para lanzarse rápidamente al agua.
Morfología
La coloración de la especie leprosa varía con la edad, presentando unos tonos más intensos en los individuos más jóvenes, con manchas y rayas naranjas o rojizas. Generalmente son de color grisáceo, marrón o incluso verdoso.
La parte inferior –denominada plastrón o peto- es de color blanquecino amarillento, con grandes manchas negras, que también pueden ir desapareciendo con la edad.
La cabeza, patas y cola son de color verde oscuro o marrón, con pequeñas manchas claras, que se perderán con la edad.
Sus ojos presentan una pupila redonda, de color negro. El iris es dorado y está atravesado por una línea horizontal oscura.
Sus extremidades son fuertes y robustas, recubiertas de grandes escamas, con cinco dedos unidos por membranas en las anteriores y tan sólo cuatro en las posteriores – más palmeadas- .
La cola es bastante larga y ancha en su base y proporcionalmente más larga en los individuos jóvenes.
La especie leprosa presenta una pronunciado dimorfismo sexual, que se evidencia en que las hembras son más grandes y pesadas que los machos, pudiendo llegar a los 20 cm. Los machos tienen la cola más larga y su plastrón es ligeramente cóncavo, para facilitar el apareamiento. Asimismo, presentan la abertura cloacal más alejada del caparazón.

Fotografía: Galápago leproso adulto
Distribución
Su área de distribución natural abarca el norte de África (Marruecos, Argelia, Túnez, Libia, Níger, Mali y sur de Mauritania), la península ibérica y el sur de Francia, aunque las mayores poblaciones a nivel mundial, posiblemente, se encuentran en nuestra península.
El hábitat preferencial de esta especie, lo constituyen pantanos, lagos, estanques, canales, charcas y arroyos, con poca corriente de agua dulce y abundante vegetación de ribera.
No son muy exigentes en cuanto a las características y calidad del agua, aunque sí que son vulnerables a la excesiva contaminación orgánica y química de las aguas donde reside.
Alimentación
La especia mauremys leprosa es omnívora, aunque prefieren los alimentos de origen animal a los vegetales. Se alimentan, sobre todo, de pequeños peces, tritones, ranas y renacuajos, gusanos, caracoles, insectos, etc., aunque tampoco desdeñan la carroña y en ocasiones, plantas acuáticas.
Costumbres
Su periodo de hibernación comprende desde el mes de noviembre hasta el de febrero o marzo, aunque en el Delta del Llobregat, por lo benigno de sus inviernos, pueden observarse ejemplares tomando el sol incluso durante los meses de diciembre o enero.
En verano, si las condiciones de sequía son desfavorables, pueden estivar, permaneciendo inactivos, enterrados en el fango, hasta que la preciada agua haga presencia.
Reproducción
Tras el periodo de hibernación, los machos entran en celo, mostrándose muy activos en la búsqueda de hembras. Cuando localizan una, la acosan, intentando subirse encima para llevar a cabo la cópula.
Los machos alcanzan la madurez sexual a los 6 o 7 años – cuando miden unos 10 cm- , mientras que las hembras son más tardías, y no llegan a ella hasta los ocho o diez años –cuando alcanzan los 15 cm- , aproximadamente.
Las hembras excavan sus nidos en tierra seca , entre los meses de junio y julio, cerca de la orilla. Allí depositarán de 3 a 9 huevos, alargados y de cáscara dura, que incubados mediante la temperatura del suelo, eclosionarán después de 30 días.
Los jóvenes cuando nacen miden unos 2,5 cm y pesan unos 5 gramos. Son casi redondos y se caracterizan por poseer una cola extremadamente larga, un caparazón blando y la cabeza achatada frontalmente.
Una vez abandonan el huevo, se dirigen, directamente, al agua, en busca de protección.

Fotografía: Cría de galápago leproso

Factores de amenaza
Aunque hace unas pocas décadas esta especie no estaba amenazada, en la actualidad, está incluida en el Atlas y Libro Rojo de los Anfibios y Réptiles de España, con la categoría de vulnerable, por lo que es importante su conservación.
Entre sus depredadores, sobre todo en su fase inmadura, se encuentran algunas rapaces y sobre todo garzas y cigüeñas, aunque entre las causas más comunes de su mortalidad podemos citar: atropellos, captura accidental mediante nansas de pesca, la destrucción de sus hábitats naturales, recolección como mascotas, o la proliferación de especies invasoras.
La tortuga de rierol puede llegar a vivir más de 20 años.
Comportamiento
Cuando se sienten amenazados, segregan un líquido nauseabundo, acompañado de heces y orina, a través de unas glándulas situadas en la zona inguinal, que por regla general, hace desistir a sus posibles enemigos.
Son fáciles de observar y fotografiar mientras descansan tomando el sol.


Fotografía: Joven galápago leproso, tomando el sol


4 comentarios:

  1. los galapagos leprosos salvajes con pocos dias de vida comerian pienso de tortuga ?

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  2. odio y me dan asco los galapagos

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  3. Ramón, la última foto es una tortuga invasora trachemys scripta elegans, Tortuga de orejas rojas americana
    Saludos

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